Mi prima Paola; hija de la hermana de mi mamá, se casó a los 18 años con un tipo que se llama Sergio.
Desde chico, muy chico, pasé horas con Paola. Mi tio Juan, hermano de mi mamá también, tenía una casa muy grande en Escalada, de la cual se hizo cargo mi tía Dora hasta el momento en que se vendió. Recuerdo que a esa casa fuimos algunas veces mi papá y yo a cortar el pasto del parque porque estaba demasiado mucho muy alto. Mas que yo, en ese entonces; que no es mucho decir porque muy alto no era, pero en ese momento era un poco chocante entrar a una casa y ver un parque gigante lleno de pasto mas alto que uno.
En un principio me caia un poco bien este muchacho Sergio, no del todo; pero tampoco mal.
Este muchacho reiteradas veces me pedía ayuda con algunas cosas de computación, y yo lo ayudaba sin querer ni prentender algo a cambio. Era el esposo de mi prima, y no me hubiese parecido bien no ayudarlo. De manera que así lo hice.
Cierto día, en modo de recompensa por haberlo ayudado (como motivo secundario) y por no tener mas lugar en la casa (como motivo principal) me regaló una computadora, un Pentium 133Mhz con 16MB de RAM; con monitor, teclado, mouse y parlantitos. Hasta que se le rompió una de las de él, entonces le ofrecí a modo de préstamo la que él mismo me había regalado. Aceptó y se consumó el trato.
De un dia al otro decidieron mudarse. Desde Lavalleja y Derqui a una casa en Villanueva, cerca del rio Salado. Claro está, se llevaron la computadora que era mía.
En realidad no es que se la llevaron; se la llevó Sergio.
Grata sorpresa la mía cuando voy a la casa y veo que habían levantado campamento no hacia mucho y que dentro del campamento estaba incluída la computadora.
Si, acepto, era (es) una computadora de mierda, pero me servía en ese entonces. Antes de darsela estaba corriendo ahí un Corel Linux (una distribución de mierda, basada en Debian) y realmente me servia para empezar a aprender cómo es ese sistema operativo.
Fue un domingo mucho tiempo despues que fuimos a Villanueva a comer un asado. Sergio me consultó aceca de cómo podia hacer andar su computadora, rota; y yo le contesté todo tal cual debia hacer. Y a modo de venganza de haberse llevado la computadora sin siquiera haberme dicho (bien podria haberla dejado en la casa, ya que mi tio tambien vive ahi y él me la podría haber devuelto), me traje no solo mi computadora, sino que ademas un módem PCI, una placa de sonido PC y una regrabadora LG 8x4x32.
Desde ese entonces no lo volví a ver. Ni a él, ni a Paola.
Simplemente saqué la lectora de CD de mi computadora, le puse la regrabadora de la de él y en su computadora la reemplacé con la lectora.
Esta mas que claro que se la voy a devolver. Si, obvio. Tarde o temprano. Pero que él haga lo mismo que tuve que hacer yo para recuperar mis cosas: 200 kilómetros. Cuando la venga a buscar, se la voy a dar.
Despues hablamos.
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