sábado, abril 24, 2004

Alguna cruz

Nuestras historias son diferentes. Supiste sonreir, supiste acariciar en el momento justo. Supiste decir lo que debias decir en el momento en que debias decirlo. Supiste callar lo que debias callar. Supiste demostrar cariño de diversas formas. Supiste encontrar alguien a quien querer.

Y yo no, yo no tengo a quien querer. Por eso escribo acá, por eso vos lo leés.

Nota aclaratoria: Esto no es para nadie en particular, es para cualquiera que lo lea. No fue inspirado en ninguna persona. De manera que no te agrandes.