Artículo 19 Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.
martes, marzo 21, 2006
Algunas veces no lo quiero hacer, otras veces quisiera que sea imposible.
Con el diario del lunes, las cosas son diferentes.