Artículo 19 Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los magistrados. Ningún habitante de la Nación será obligado a hacer lo que no manda la ley, ni privado de lo que ella no prohíbe.
Qué lindo sería volar
Qué lindo sería vivir abajo del agua
Qué lindo sería respirar y caminar por la tierra
Qué lindo sería nadar como un pez
Qué lindo sería volar como un ángel
Qué lindo sería estar vivo